La Defensa como medio y la Seguridad como su fin; funciones fundamentales e indelegables de la autoridad del Estado

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En el marco del Programa de Formación Político Estratégica,  organizado por el Instituto de Desarrollo del Pensamiento Patria Soñada, IDPPS, se desarrolló el primer encuentro correspondiente  al Seminario de  Seguridad y Defensa,  a cargo del Contralmirante (R) Cíbar Benítez Cáceres.

“La primera y fundamental función del Estado Moderno, sigue siendo la de defender y proporcionar seguridad a sus habitantes”, empezó diciendo el militar de extensa trayectoria a los participantes del módulo.

La función Defensa refiere a la preservación de los Intereses Vitales del Estado, es decir, de su población, de su territorio y de su legítima forma de conducción política y económica. La defensa proporciona la seguridad necesaria para que cada ciudadano, tanto en el plano personal, como en el colectivo de la Nación, pueda desarrollarse en libertad, respeto y orden. “La defensa es el medio, la seguridad su fin”.

El Poder

El ejercicio de la soberanía del Estado, tanto en el ámbito interno como en el externo, está en relación directa al Poder del Estado; poder, en su acepción de capacidad, por tanto, único e indivisible a pesar de sus tres ámbitos bien definidos que son el Político, el Económico y el Militar. Estas tres expresiones o campos del Poder tienen una interdependencia absoluta al punto que la fortaleza o debilidad de uno de ellos incide directamente en el total; en términos matemáticos, es el resultado de un producto, no de una suma.

La Estrategia

“Los conflictos no se resuelven; se manejan”, ya que su causante son los intereses y estos no desaparecen. Como ejemplo, habló del conflicto de las Malvinas o Falklands entre Argentina e Inglaterra. Si bien desencadenó una guerra que dio como vencedor a Inglaterra, es un conflicto que no cesó, no se resolvió del todo, es una puja constante, motivada por el interés de ambas partes, de ambos lados, expresó el Contralmirante.

Referente a la Estrategia enfatizó que, si bien el concepto nació en el ámbito militar, se extendió, con el tiempo, al ámbito político/civil, con un carácter mucho más profundo y útil. En tal sentido, hizo un repaso histórico muy interesante, de cómo los sucesos bélicos, particularmente en Europa, sirvieron para la evolución del pensamiento estratégico. Destacó a los precursores pre-Napoleónicos, como el autor de “El arte de la guerra” Sun Tzu, 500 años a.C, piedra angular de la estrategia política de Mao Tse Tung y de las tácticas del ejército rojo chino. Así como a Tucídides, primer escritor de relevancia sobre la guerra desde el punto de vista de la causa y su efecto, sin intervención de los dioses. Narró las Guerras del Peloponeso y dio inicio a la escuela del realismo político. Se nombró a Maquiavelo, que, si bien no es un autor conocido de la estrategia, sus obras están llenas de eventos militares con un enfoque de la “realpolitik”.

Se refirió a las guerras napoleónicas, a Clauzewitz y otros, hasta llegar a las dos Guerras mundiales y luego a la llamada Guerra fría que condujo a la frágil estrategia de la disuasión nuclear con su concepto de “destrucción mutua asegurada”, como método de disuasión para evitar la “Guerra caliente” de consecuencias inimaginables.

 El Paraguay por su parte también pasó a lo largo de su historia por conflictos bélicos tanto internacionales como la guerra de la triple alianza y la guerra con Bolivia, así como una triste guerra civil de 1947 de la cual tenemos que aprender como Nación.

El Contralmirante (R) Cíbar Benítez Cáceres es Licenciado en Ciencias Militares, Magister en Planeamiento y Conducción Estratégica, Excomandante de la Armada y de las Fuerzas Militares, Exministro y Secretario Permanente del Consejo de Defensa Nacional.

Para más informes sobre las iniciativas del instituto contactarse al IDPPS al 021 214532 o escriba al correo institucional idppspy@gmail.com o por redes sociales como Facebook, Twitter e Instagram.

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